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Cuaderno de Filosofía

La filosofía presocrática comprende a un conjunto heterogéneo de filósofos y escuelas filosóficas griegas anteriores a Sócrates. Entre los pioneros, los originarios de la costa de Jonia, fueron llamados "físicos" por preocuparse por temas que refieren a la fisis (physis), es decir, la naturaleza. Otros, sin embargo, los llamados "itálicos" (por ser originarios de la Magna Grecia, la actual Italia, o haberse asentado en su territorio), orientaron sus preocupaciones preferentemente hacia el terreno de la lógica y de las matemáticas.Pero cabe dejar en claro que en este principio no era entendido como originario de todas las cosas, ya que los griegos no tenían una idea de creación del universo a partir de la nada, sino que era concebido como un elemento común presente en la naturaleza, a partir del cual, luego, se conformaría el resto.Ahora bien, sobre cuáles eran dichos principios y de qué naturaleza, sus ideas diferían bastante. Para algunos, el principio podía ser cualquiera de los llamados "cuatro elementos" (tierra, agua, aire y fuego).

Aristóteles fue el primero en referirise a los presocráticos como filósofos "físicos" [οι φυσικοί] y les atribuyó esta búsqueda del αρχή como rasgo distintivo. Con todo, algunos comentaristas contemporáneos (v. gr. H. Cherniss: Aristotle's Criticism of Plato and the Academy) consideran que el criterio aristotélico es erróneo. En efecto: si bien es cierto que algunos filósofos presocráticos sostienen que el Universo está formado por un principio natural —como el aire [αήρ], en el caso de Anaxímenes—, no es menos cierto que, en el caso de otros filósofos —como Tales o Heráclito, para quienes el agua [ύδωρ] o el fuego [πύρ], respectivamente, constituyen el principio generador de todo lo que existe—, los elementos serían meros "precursores" del cosmos (cf. G. S. Kirk & J. E. Raven: The Presocratic Philosophers), o bien complejas metáforas que en realidad no supondrían la existencia de un elemento concreto como principio fundante. Tal podría ser el caso de Heráclito, quien podría utilizar el fuego como símbolo para representar el devenir "...fuego que se enciende según medida y se apaga según medida".

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